La comunicación con los hijos, clave para su educación
La comunicación fluida y constante entre padres e hijos es la clave para una correcta transmisión de los valores y para la buena salud mental de los hijos. Esto, que parecía una obviedad, ha sido ratificado por un reciente estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Según una ámplia encuesta realizada a niños de entre 11 y 15 años, aquellos que mantienen una comunicación regular con sus padres suelen tener una imagen más positiva de sí mismos, empezando por el cuerpo y las propias convicciones, tienen comportamientos menos agresivos y suelen valorar más la propia salud. Como consecuencia de todo ello, los niños tienen menos riesgos de consumir drogas, tabaco o alcohol y es más difícil que muestren comportamientos problemáticos.
En España, el 94% de niñas de once años dice que es fácil hablar con su madre, porcentaje que baja al 81% cuando las niñas tienen quince años. Por su parte, los niños pasan del 93% al 79%. Los datos muestran que la comunicación con la madre suele ser más fácil e íntima y la mantenida con los padres tiene un carácter más funcional y unos objetivos concretos, como pedir consejos y favores o transmitir información.
En este sentido, según los coordinadores del estudio, el rol del padre es más el de protector, mientras que la madre es la persona confiable dentro de la familia. La buena relación con el padre, dice el estudio, es decisiva en la buena imagen que los menores tienen de sí mismos. Si diferenciamos entre niños y niñas, los varones tienen más facilidad para relacionarse sin problemas con su familia.