Recetas para niños: una lasaña para que coman verduras
Las dificultades para que los niños coman verduras son uno de los clásicos problemas a la hora de comer con los hijos. Con esta receta tal vez puedas tenerlo más fácil para que coman algo verda, y si te ayudan y les hace ilusión comer lo que han preparado, pues mucho mejor.
Ingredientes para seis personas:
250 gramos de placas de lasaña, dos calabacines medianos, un quilo de espinacas, dos berenjenas pequeñas, tres o cuatro zanahorias, tres puerros, harina, un litro leche, un bote de tomate frito casero, aceite de oliva, pimienta negra, mantequilla y sal.
¿Cómo prepararlo?
Limpiaremos, pelaremos y cortaremos todas las verduras en cuadraditos, algo en lo que pueden echarte una mano los niños si son suficientemente mayores para tocar un cuchillo. Si no, pueden participar pelando las verduras con un pelador. Las espinacas, por supuesto, no se cortan, porque más tarde las rehogaremos, pero los niños pueden ayudarte a limpiarlas.
En la misma sartén donde habremos rehogado las espinacas vamos a hacer todas las verduras. Sucesivamente iremos echando el calabacín, la berenjena, la zanahoria y el puerro y lo vamos reservando.
La bechamel
La bechamel es ideal para ellos, porque pueden ayudarte a remover. lo normal es que cometan errores, que no le den la velocidad adecuada o que les queden grumos, pero pueden probarlo para darse cuenta o bien podemos dejarlo tal cual para que sepan cómo hacerlo (o cómo no hacerlo) la próxima vez: del error nace la sabiduría. Parte de la bechamel irá con las espinacas.
El montaje
Después de cocer las placas de lasaña las extenderemos sobre un paño limpio en la encimera para que se escurran y prepararemos la fuente. En el fondo de la fuente pondremos una una capa de bechamel y, encima suyo, suficientes placas como para cubrir el suelo de la placa. Después irá la capa de espinacas mezcladas con la bechamel. Cubrimos todas las espinacas con placas, y vamos a por el siguiente piso, que será del resto de verduras con un poco de bechamel. Con cuatro pisos, dos de cada mezcla, valdrá. encima de la última placa de lasaña pondremos bechamel y abundante queso.
Solo quedará hornearlo al gusto. Hay quien le gusta el queso derretido y a otros les gusta crujiente. ¡Qué aproveche!