Robin Hood robaba a los ricos para dárselo a los pobres. Bajo esa premisa, dispara a las bolsas de oro para empujarlas a tu carromato y repartir el dinero entre el pueblo.
Un mago malvado ha convertido a todos los habitantes de tu pueblo en piedra. Con la ayuda del mago blanco, conviértete en un dragón invencible y salva a tus compañeros.